El triangulo de las serpientes [Potter, Zabini y Malfoy]

Hacía tiempo que les había prometido a los chicos una cerveza, pero casi nunca tenía tiempo así que ese día me lo iba a dedicar a ellos. Salí del vestíbulo y caminé por los pasillos, esa tarde volvería a hablar con mis amigos y hablaríamos sobre Quidditch y lo que habían hecho durante el verano.

Mi familia, o tal vez mi abuelo más que ningún otro miembro de esta, jamás se hubiera imaginado que yo sería el mejor amigo de uno de los Potter y tampoco de los Weasley. En cambio, mi padre ya lo había aceptado y además no era el mismo de cuando tenía diecisiete años. Yo estaba seguro de que el abuelo Lucius lo presionaba mucho, esa es la razón por la cual el no lo hace conmigo y deja que escoja a mis amigos.

Con Jasper las cosas eran diferentes porque crecimos juntos con mi prima Charlotte y el también es una serpiente pero más allá de eso mi padre no hace diferencias entre Albus y el, eso me alegra mucho. Estoy seguro que el padre de Albus tampoco se esperaba que yo fuese amigo de su hijo, pero una ves que me conocieron bien me trataron como a uno más de la familia.

Salí de mis pensamientos y al ver que no había nadie en el pasillo me aparecí en Las Tres Escobas, ya le había mandado una lechuza a cada uno el día anterior, así que no tardarían en llegar. El lugar no estaba muy lleno pero había gente, amaba ese ambiente, algún día adivinaría porque. Me senté en la mesa contra la ventana, ni muy atrás ni muy adelante, siempre nos sentábamos allí. Aunque ya no veníamos tan seguido, cada uno tenía nuevas ocupaciones pero aún así eso no nos separaría.