Es tarde, hace frío y menos gente normal hay de todo (Vera)

Era ya algo tarde, los alumnos dormían, los prefectos habían terminado su ronda y el profesor de guardia andaba lejos de mi via de escape. Llevaba tres años sin dar explicaciones a nadie y no iba a empezar ahora.

Salí por la puerta principal, para que andar por esos atajos en los que nadie te ve salir cuando puedo hacerlo por la puerta que más chirría de todo Hogwart.

Me coloqué bien la capucha y me abrigué, a esas horas no hacia demasiada buena temperatura.
Fui dejando un rastro sobre la nieve de pisadas medio borradas por el bajo de la capa.
-Cabeza de Puerco.- miré el cartel, cayeron unas gotas de sangre. -Ahora- entré rápidamente esquivando ese dichoso goteo del cartel.

Extrañas criaturas poblaban el bar. -Levanté la cabeza ligeramente en señal de saludo y me senté al final de la barra a esperar a que llegar.